He oído de muchas bocas que las personas no cambian, a menudo cuando se habla de los defectos de las personas se dice eso: "Las personas nunca cambian"; y siempre me he preguntado eso. ¿Será acaso que no cambiamos?.
Escuché en una ocasión que alguien decía "somos lo que recordamos", y esta persona planteaba que cada día vivimos cosas diferentes y estas cosas son almacenadas en nuestro cerebro, conforme pasa el tiempo nuestro pensamiento va evolucionando, entiende cosas, conoce cosas y por lo tanto cada día que pasa somos diferentes, algo que vivamos nos puede cambiar; por ejemplo somos de cierta forma en este momento, pero si la próxima semana tenemos la oportunidad de viajar a África y ver de cerca la hambruna, quizá una incomodidad surja en nuestro interior y al volver comencemos una lucha para acabar con el hambre en el mundo. Si no fuera por nuestro cerebro no podríamos cambiar.
Seguramente esa podría ser una prueba de que las personas sí cambian, pero también es importante saber que solo cambian quienes quieren cambiar y que no es tan fácil ni tan común que se cambie algo malo por algo bueno.
A estas conclusiones he llegado recientemente, y a otras más profundas de las cuales ya no me acuerdo por la mala memoria que tengo.
